"...sexuality is a human instinct as natural as hunger or thirst". Theses on Communist Morality in the Sphere of Marital Relations by Alexandra Kollontai.
HACE unos días me enfrenté a uno de los mayores problemas con los que se puede encontrar un bloguero. La pérdida, por error, de un post en el que había invertido tiempo, sudor, ilusión y esfuerzo. Eso me pasó hace una semana. Tuve un descuido y se me borró una entrada en la que llevaba trabajando varios días. Y me resultó imposible volver a recuperarla. Invertí unas cuantas horas en la composición de una nueva "Carta desde el Este". Una carta que me estaba saliendo muy chula y en la que reflexionaba sobre la eterna lucha entre Kanapinis, el hombre-cannabis que en el Užgavėnės o Carnaval lituano representa a la Pimavera, y Lašininis, el porquero, quien representa al Invierno. También incluía en aquella carta frustrada una reflexión sobre la pobreza en Lituania. Sobre las señoras y señores mayores que trabajan en retirar la nieve y el hielo de la vía pública. Provistos de enormes y pesadas escarpas de hierro. Y enfundados en chalecos naranjas con bandas reflectantes. Y con el logo de alguna de las "empresas de servicios" que los ayuntamientos contratan para tan difícil y penosa tarea. Muchos de ellos son ancianos y deberían estar disfrutando de una jubilación gozosa con los nietos. En vez de picar hielo a las ocho de la mañana con temperaturas que en Lituania este año han llegado a caer por debajo de los 25 grados bajo cero. Ya digo que el post era la reòstia. Estaba especialmente inspirado cuando lo subí a mi blog. Pero cosas de la vida. Intenté introducir algunos cambios y no sé qué narices pasó que el post simplemente desapareció. Y no lo pude ya recuperar. Busqué información en la red. Y encontré varios sitios que daban consejos al respecto. Le pedí ayuda incluso a un tal Peter Enviroman, un pensionista americano que se dedica a ayudar blogueros en apuros. Por la foto que tiene subida a su blog, el tipo parece de ascendencia china o japonesa. El Sr. Enviroman (menudo apellido!) me dijo que mi única esperanza era que algún empleado de blogger leyese mi queja. Una queja que escribí, claro está, en inglés. Porque parece ser que hay más posibilidades que algún employee de blogger se digne a atender tu queja si escribes en la lengua del Imperio del Bien. En fin, que doy la carta por perdida. En todo este proceso he aprendido que hay que ser precavido. Y que regularmente debo hacer copias del contenido del blog. No sea que a alguno de los employees de blogger se le ocurra eliminarlo. Así, sin más. Por considerarlo ofensivo. O por vulnerar no sé que leches de normas que tiene la empresa. Es lo malo de poner tu vida en manos de una multinacional. Un día te despiden y te desmontan el chiringuito. Internet, digan lo que digan, está en gran medida controlado por cuatro o cinco multinacionales. Y ese rollo que nos cuentan de que internet sirve para democratizar el saber y para promover los derechos humanos y la "sociedad del conocimiento" es un puro cuento chino. Tal vez en sus orígenes había algo de underground en la red. Pero ahora mismo, desde mi punto de vista, internet es más un instrumento de dominación que de liberación. Un instrumento al servicio de los intereses de las multinacionales. E intervenido, controlado y promovido por el poder. El otro día vi una entrevista que la BBC le hacía a un payo que trabajaba en el Departamento de Estado de la Sra. de Clinton. Un tipo joven, elegante, con una pinta de niño pijo repelente. El tipo explicaba cómo la "Administración Obama" utilizaba intensivamente las redes sociales para promover la democracia y los derechos humanos en el mundo. Que es una manera eufemística de decir que el Imperio del Bien (los angloamericanos) utiliza internet para desestabilizar gobiernos hostiles, manipular información y promover el terrorismo de Estado.
En fin, aquí en Lituania parece que Kanapinis triunfará sobre el porquero. Aunque este año le está costando lo suyo. Hace dos días, el 8 de marzo, día internacional de la mujer (trabajadora), las temperaturas bajaron aquí de sopetón. Llegando por la noche a caer por debajo de los -20 grados Celsius. Lo que no es habitual a estas alturas del año. Ayer 9 de marzo nevó copiosamente en Vilnius y Kaunas. Y todo volvió a cubrirse con un espeso manto de nieve. Hoy me he levantado bien de mañana y he tomado el trolebús que me llevaba al centro de Kaunas. Y he visto las brigadas de ancianos y ancianas nuevamente afanándose por retirar la nieve de las principales calles de la ciudad. Ataviados con sus chalecos naranjas, sus botas de goma y provistos de palas, picos y escarpas de hierro.
No puedo dejar de hacer referencia al 8 de marzo, día internacional de la mujer (trabajadora). Y escribo "trabajadora" entre paréntesis porque ese adjetivo prácticamente ya no se utiliza. "Trabajadora" es una palabra peligrosa con claras connotaciones socialistas. Mejor eliminarla. Y tranformar el día en una jornada dedicada a la mujer en general. Sin especificar su clase o condición social. Ese día el centro de Kaunas se llenó de puestos de flores. Porque aquí el 8 de marzo es un día para regalar flores a las mujeres. Especialmente tulipanes rojos. En Lituania no se estila el rollo malhumorado y combativo que sufrimos en Is Pain. No se ven concentraciones de mujeres enfundadas en horteras camisetas violetas ni recreando el símbolo de la vagina con las dos palmas de las manos violentamente alzadas. Ni hay manifestaciones encabezadas por abogadas con sobrepeso diciendo sandeces sobre el sexo -que obviamente hace años que no practican- y promoviendo la erradicación del macho de la especie. Sobre todo la erradicación del varón heterosexual, caucásico y blanco. Porque con los individuos que no pertenecen a este grupo, las féminas españolas se muestran mucho más complacientes. El día de la mujer se ha convertido en España en el día contra la violencia de género y del hoy_no_me_abro_de_piernas. Cuando, de hecho, en sus orígenes, lo que preconizaban las teóricas y militantes de la liberación de la mujer era algo bien distinto. La disolución de la institución familiar (que es la que genera la violencia doméstica) y el sexo libre, alegre y sin ataduras conyugales. Aquí, en Lituania, ya digo que el rollo de militantes frustadas no se estila para nada. Las lituanas en general ese día prefieren ponerse guapas y vestirse para la ocasión. Se perfuman, se depilan, se huntan bien huntadas con body-milk. Y así, bien acicaladas, esperan que el novio, el marido, el amante, los amigos varones y los compañeros de trabajo les regalen tulipanes. Y bueno, ese día los restaurantes se llenan de parejitas. Y las farmacias y supermercados se vacían de condones. Como debe ser, digo yo. Por la televisión vi una curiosa iniciativa del Ministerio de Interior lituano. Una iniciativa que creo que debería introducirse en Is Pain. La policía de tráfico detenía los vehículos que estaban conducidos por mujeres. Y en vez de ponerles un multazo, lo que hacían los agentes era regalarles tulipanes. Claro, escogían a las afortunadas al azar. Porque el Ministerio del Interior tenía un presupuesto muy limitado. Y no había tulipanes para todas las conductoras del país. Policías regalando flores a las mujeres. Es la primera vez que veo una cosa similar.
Seguí con cierto interés el tratamiento que los medios de comunicación lituanos hicieron de la jornada. También hice un poco de zapping. Y acabé viendo los noticiarios de la BBC y de la CNN. Todos ellos ocultaron un hecho histórico. Como tratando de borrar de la Historia que el 8 de marzo fue reconocido por primera vez como día internacional de la mujer (trabajadora) nada menos que por Lenin. A instancias de la activista e intelectual bolchevique Alexandra Kollontai. Quien fuera la primera mujer en ocupar el cargo de embajadora. Kollontai fue una intelectual de primera fila. Y llegó a teorizar sobre el amor libre en una sociedad igualitaria y sin clases donde la mujer disfrutaría de la misma libertad sexual que tienen los hombres. La emancipación de la mujer estaría, por tanto, íntimamente ligada con la construcción del socialismo. E implicaría necesariamente una revolución también en el plano sexual y afectivo. En la BBC pusieron unas imágenes de Hillary Clinton y de Meryl Streep. Y también de Madonna. Todas ellas, claro está, con sobradas credenciales para representar el espíritu rebelde y emancipador del día de la mujer. Sobre todo la Sra. Clinton. Sufrida y amantísima esposa de aquel Presidente que gustaba de jugar con puros habanos y becarias arrodilladas y mamonas. Mientras ordenaba a Javier Solana, por entonces Secretario General de la OTAN, que bombardease Belgrado. Ninguno de esos "medios de información" dijo ni pío ni sobre la Sra. Kollontai ni sobre Clara Zetkin. Las auténticas creadoras del día internacional de la mujer (trabajadora). En la Lietuvos Televizija aparecieron la Sra. Dalia Grybauskaite (cuyo apellido podríamos traducir como "la hija de la seta") y la Sra. Irena Degutiene. La primera es la Presidenta del país. Y la segunda ocupa desde hace unos meses el cargo de Presidenta del Seimas o Parlamento lituano. Pero también pasaron por alto a Lenin y a la Kollontai. E incluso olvidaron que unas de las precursoras del día internacional de la mujer fue Emma Goldman. Una intelectual y luchadora anarquista judía que nació aquí mismo, en Kaunas. En tiempos del Zar. Y que siendo adolescente emigró a Estados Unidos. Donde se convirtió en una de la líderes del movimiento anarquista americano. A Emma Goldmann, siendo una ilustre ciudadana nacida en Kaunas, deberían dedicarle al menos una calle. Aunque mucho me temo que aquí muy pocos conocen quién fue Emma Godman. O Clara Zetkin. O Alexandra Kollontai. Todas ellas extraordinarios seres humanos. Intelectualmente hermosas. Luminosas como los tulipanes rojos. Les dedico a todos ellas este post. Como un humilde homenaje a su memoria y a su lucha por la emancipación de la mujer. Y por el amor libre, entre seres iguales. Por el amor sin ataduras.
Historia de la fotografía: Subo una fotografía que tomé de un envoltorio de salchichas ahumadas de la marca "Tarybines". Palabra lituana que podría traducirse por "Soviéticas". Las que aparecen en la fotografía son salchichas picantes, rellenas con trocitos de queso auténtico. Y que son mis favoritas. "Tarybines " es una marca comercializada por la empresa de salchichas "Samsono". Que tiene muy buena reputación por la calidad de sus productos. La empresa comercializa varios tipos de salchichas ahumadas y en todos los envoltorios incluyen un dibujo de un campesino o campesina que recuerdan, por su diseño, los tiempos del "realismo soviético". En el envoltorio del paquete de salchichas que aparece en la fotografía puede verse una campesina sonriendo. Una campesina guapa pero sin sex-appeal. Una mujer joven y sin maquillar. Con un pañuelo blanco cubriéndole el pelo. Una mujer trabajadora que mira serenamente al futuro. El 8 de marzo fue su día. Espero que nadie haga una interpretación torcida de las salchichas que aparecen en el plato. Tomé la foto antes de comérmelas, claro.
HACE unos días me enfrenté a uno de los mayores problemas con los que se puede encontrar un bloguero. La pérdida, por error, de un post en el que había invertido tiempo, sudor, ilusión y esfuerzo. Eso me pasó hace una semana. Tuve un descuido y se me borró una entrada en la que llevaba trabajando varios días. Y me resultó imposible volver a recuperarla. Invertí unas cuantas horas en la composición de una nueva "Carta desde el Este". Una carta que me estaba saliendo muy chula y en la que reflexionaba sobre la eterna lucha entre Kanapinis, el hombre-cannabis que en el Užgavėnės o Carnaval lituano representa a la Pimavera, y Lašininis, el porquero, quien representa al Invierno. También incluía en aquella carta frustrada una reflexión sobre la pobreza en Lituania. Sobre las señoras y señores mayores que trabajan en retirar la nieve y el hielo de la vía pública. Provistos de enormes y pesadas escarpas de hierro. Y enfundados en chalecos naranjas con bandas reflectantes. Y con el logo de alguna de las "empresas de servicios" que los ayuntamientos contratan para tan difícil y penosa tarea. Muchos de ellos son ancianos y deberían estar disfrutando de una jubilación gozosa con los nietos. En vez de picar hielo a las ocho de la mañana con temperaturas que en Lituania este año han llegado a caer por debajo de los 25 grados bajo cero. Ya digo que el post era la reòstia. Estaba especialmente inspirado cuando lo subí a mi blog. Pero cosas de la vida. Intenté introducir algunos cambios y no sé qué narices pasó que el post simplemente desapareció. Y no lo pude ya recuperar. Busqué información en la red. Y encontré varios sitios que daban consejos al respecto. Le pedí ayuda incluso a un tal Peter Enviroman, un pensionista americano que se dedica a ayudar blogueros en apuros. Por la foto que tiene subida a su blog, el tipo parece de ascendencia china o japonesa. El Sr. Enviroman (menudo apellido!) me dijo que mi única esperanza era que algún empleado de blogger leyese mi queja. Una queja que escribí, claro está, en inglés. Porque parece ser que hay más posibilidades que algún employee de blogger se digne a atender tu queja si escribes en la lengua del Imperio del Bien. En fin, que doy la carta por perdida. En todo este proceso he aprendido que hay que ser precavido. Y que regularmente debo hacer copias del contenido del blog. No sea que a alguno de los employees de blogger se le ocurra eliminarlo. Así, sin más. Por considerarlo ofensivo. O por vulnerar no sé que leches de normas que tiene la empresa. Es lo malo de poner tu vida en manos de una multinacional. Un día te despiden y te desmontan el chiringuito. Internet, digan lo que digan, está en gran medida controlado por cuatro o cinco multinacionales. Y ese rollo que nos cuentan de que internet sirve para democratizar el saber y para promover los derechos humanos y la "sociedad del conocimiento" es un puro cuento chino. Tal vez en sus orígenes había algo de underground en la red. Pero ahora mismo, desde mi punto de vista, internet es más un instrumento de dominación que de liberación. Un instrumento al servicio de los intereses de las multinacionales. E intervenido, controlado y promovido por el poder. El otro día vi una entrevista que la BBC le hacía a un payo que trabajaba en el Departamento de Estado de la Sra. de Clinton. Un tipo joven, elegante, con una pinta de niño pijo repelente. El tipo explicaba cómo la "Administración Obama" utilizaba intensivamente las redes sociales para promover la democracia y los derechos humanos en el mundo. Que es una manera eufemística de decir que el Imperio del Bien (los angloamericanos) utiliza internet para desestabilizar gobiernos hostiles, manipular información y promover el terrorismo de Estado.
En fin, aquí en Lituania parece que Kanapinis triunfará sobre el porquero. Aunque este año le está costando lo suyo. Hace dos días, el 8 de marzo, día internacional de la mujer (trabajadora), las temperaturas bajaron aquí de sopetón. Llegando por la noche a caer por debajo de los -20 grados Celsius. Lo que no es habitual a estas alturas del año. Ayer 9 de marzo nevó copiosamente en Vilnius y Kaunas. Y todo volvió a cubrirse con un espeso manto de nieve. Hoy me he levantado bien de mañana y he tomado el trolebús que me llevaba al centro de Kaunas. Y he visto las brigadas de ancianos y ancianas nuevamente afanándose por retirar la nieve de las principales calles de la ciudad. Ataviados con sus chalecos naranjas, sus botas de goma y provistos de palas, picos y escarpas de hierro.
No puedo dejar de hacer referencia al 8 de marzo, día internacional de la mujer (trabajadora). Y escribo "trabajadora" entre paréntesis porque ese adjetivo prácticamente ya no se utiliza. "Trabajadora" es una palabra peligrosa con claras connotaciones socialistas. Mejor eliminarla. Y tranformar el día en una jornada dedicada a la mujer en general. Sin especificar su clase o condición social. Ese día el centro de Kaunas se llenó de puestos de flores. Porque aquí el 8 de marzo es un día para regalar flores a las mujeres. Especialmente tulipanes rojos. En Lituania no se estila el rollo malhumorado y combativo que sufrimos en Is Pain. No se ven concentraciones de mujeres enfundadas en horteras camisetas violetas ni recreando el símbolo de la vagina con las dos palmas de las manos violentamente alzadas. Ni hay manifestaciones encabezadas por abogadas con sobrepeso diciendo sandeces sobre el sexo -que obviamente hace años que no practican- y promoviendo la erradicación del macho de la especie. Sobre todo la erradicación del varón heterosexual, caucásico y blanco. Porque con los individuos que no pertenecen a este grupo, las féminas españolas se muestran mucho más complacientes. El día de la mujer se ha convertido en España en el día contra la violencia de género y del hoy_no_me_abro_de_piernas. Cuando, de hecho, en sus orígenes, lo que preconizaban las teóricas y militantes de la liberación de la mujer era algo bien distinto. La disolución de la institución familiar (que es la que genera la violencia doméstica) y el sexo libre, alegre y sin ataduras conyugales. Aquí, en Lituania, ya digo que el rollo de militantes frustadas no se estila para nada. Las lituanas en general ese día prefieren ponerse guapas y vestirse para la ocasión. Se perfuman, se depilan, se huntan bien huntadas con body-milk. Y así, bien acicaladas, esperan que el novio, el marido, el amante, los amigos varones y los compañeros de trabajo les regalen tulipanes. Y bueno, ese día los restaurantes se llenan de parejitas. Y las farmacias y supermercados se vacían de condones. Como debe ser, digo yo. Por la televisión vi una curiosa iniciativa del Ministerio de Interior lituano. Una iniciativa que creo que debería introducirse en Is Pain. La policía de tráfico detenía los vehículos que estaban conducidos por mujeres. Y en vez de ponerles un multazo, lo que hacían los agentes era regalarles tulipanes. Claro, escogían a las afortunadas al azar. Porque el Ministerio del Interior tenía un presupuesto muy limitado. Y no había tulipanes para todas las conductoras del país. Policías regalando flores a las mujeres. Es la primera vez que veo una cosa similar.
Seguí con cierto interés el tratamiento que los medios de comunicación lituanos hicieron de la jornada. También hice un poco de zapping. Y acabé viendo los noticiarios de la BBC y de la CNN. Todos ellos ocultaron un hecho histórico. Como tratando de borrar de la Historia que el 8 de marzo fue reconocido por primera vez como día internacional de la mujer (trabajadora) nada menos que por Lenin. A instancias de la activista e intelectual bolchevique Alexandra Kollontai. Quien fuera la primera mujer en ocupar el cargo de embajadora. Kollontai fue una intelectual de primera fila. Y llegó a teorizar sobre el amor libre en una sociedad igualitaria y sin clases donde la mujer disfrutaría de la misma libertad sexual que tienen los hombres. La emancipación de la mujer estaría, por tanto, íntimamente ligada con la construcción del socialismo. E implicaría necesariamente una revolución también en el plano sexual y afectivo. En la BBC pusieron unas imágenes de Hillary Clinton y de Meryl Streep. Y también de Madonna. Todas ellas, claro está, con sobradas credenciales para representar el espíritu rebelde y emancipador del día de la mujer. Sobre todo la Sra. Clinton. Sufrida y amantísima esposa de aquel Presidente que gustaba de jugar con puros habanos y becarias arrodilladas y mamonas. Mientras ordenaba a Javier Solana, por entonces Secretario General de la OTAN, que bombardease Belgrado. Ninguno de esos "medios de información" dijo ni pío ni sobre la Sra. Kollontai ni sobre Clara Zetkin. Las auténticas creadoras del día internacional de la mujer (trabajadora). En la Lietuvos Televizija aparecieron la Sra. Dalia Grybauskaite (cuyo apellido podríamos traducir como "la hija de la seta") y la Sra. Irena Degutiene. La primera es la Presidenta del país. Y la segunda ocupa desde hace unos meses el cargo de Presidenta del Seimas o Parlamento lituano. Pero también pasaron por alto a Lenin y a la Kollontai. E incluso olvidaron que unas de las precursoras del día internacional de la mujer fue Emma Goldman. Una intelectual y luchadora anarquista judía que nació aquí mismo, en Kaunas. En tiempos del Zar. Y que siendo adolescente emigró a Estados Unidos. Donde se convirtió en una de la líderes del movimiento anarquista americano. A Emma Goldmann, siendo una ilustre ciudadana nacida en Kaunas, deberían dedicarle al menos una calle. Aunque mucho me temo que aquí muy pocos conocen quién fue Emma Godman. O Clara Zetkin. O Alexandra Kollontai. Todas ellas extraordinarios seres humanos. Intelectualmente hermosas. Luminosas como los tulipanes rojos. Les dedico a todos ellas este post. Como un humilde homenaje a su memoria y a su lucha por la emancipación de la mujer. Y por el amor libre, entre seres iguales. Por el amor sin ataduras.
Historia de la fotografía: Subo una fotografía que tomé de un envoltorio de salchichas ahumadas de la marca "Tarybines". Palabra lituana que podría traducirse por "Soviéticas". Las que aparecen en la fotografía son salchichas picantes, rellenas con trocitos de queso auténtico. Y que son mis favoritas. "Tarybines " es una marca comercializada por la empresa de salchichas "Samsono". Que tiene muy buena reputación por la calidad de sus productos. La empresa comercializa varios tipos de salchichas ahumadas y en todos los envoltorios incluyen un dibujo de un campesino o campesina que recuerdan, por su diseño, los tiempos del "realismo soviético". En el envoltorio del paquete de salchichas que aparece en la fotografía puede verse una campesina sonriendo. Una campesina guapa pero sin sex-appeal. Una mujer joven y sin maquillar. Con un pañuelo blanco cubriéndole el pelo. Una mujer trabajadora que mira serenamente al futuro. El 8 de marzo fue su día. Espero que nadie haga una interpretación torcida de las salchichas que aparecen en el plato. Tomé la foto antes de comérmelas, claro.
Estadísticas de las Cartas desde el Este
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios y sugerencias. Te envío un saludo.Argonautas.